Ayer se reunió, por primera vez, la Comisión de Seguimiento de la Pandemia COVID-19, convocada por la Dirección del ICASS. Por parte de la directora del ICASS se realiza una exposición de los afectados por Covid en los tres centros de atención a la dependencia:
- Cad Santander: 18 residentes.
- CAD Laredo: informa que no hay casos confirmado, en nuestro turno, le recordamos que hay una trabajadora que sigue siendo positivo en las PCR.
- Cad Sierrallana: nos informa de una residente en aislamiento. En nuestro turno de palabra, le pedimos que revisen el protocolo para garantizar que la compañera de habitación no dance de cuarte en cuarto.
Además, cita los diferentes problemas ya que estamos en Cantabria en un momento de transmisión comunitaria, dónde parece evidente que el peligro y la transmisión del virus está en la calle. En su discurso enfatiza en que para disminuir la incidencia hay que reducir las relaciones sociales y el contacto directo. Confirma que el riesgo existe y puede ocurrir en cualquier centro de la región. Afirma que: obviamente, en Santander, por sus características el riesgo es mayor, sin olvidar que el factor suerte es importante. Asegurar una seguridad 100% es difícil y sigue relatando las medidas adoptadas. Y justifica una revisión de los planes de contingencia para adaptarlos a esta situación (a estas alturas de la película esperábamos que los que nos dirigen supiesen que un plan de contingencia es la adaptación de la planificación ordinaria del centro a una hipotética situación, por lo que esa adaptación debería estar hecha… pero corramos un tupido velo…).
Desde Trabajadores Unidos tras trasladar nuestra preocupación, en base a la normativa vigente y los protocolos establecidos y las restricciones del nivel de alerta 4 en la región solicitamos que se enmarquen las actuaciones adecuadas a ese estado y citando sus propias palabras que avalan que el peligro está fuera del centro, solicitamos el cierre de puertas para que prevalezca, ante todo, el derecho a la salud. El virus no se va a frenar hasta que el centro no funcione como una unidad de aislamiento única.
En este sentido, la respuesta de la directora del ICASS es tajante: “NO VA A PEDIR EL CIERRE DEL CENTRO EN NINGÚN MOMENTO” resaltando que es: “UNA DECISIÓN PERSONAL QUE HACE POR ÉTICA”.
Desde nuestra organización reiteramos que es la única medida pendiente de adoptar, para proteger la salud de todos, trabajadores y usuarios, la única forma de proteger vidas.
La Dirección del ICASS nos comunicó que la reunión, únicamente, tenía carácter informativo. Por lo que hemos preguntado para que nos informen:
- De las medidas que se están realizando desde la Dirección del ICASS, para que el Consejero de Sanidad, dicte la resolución que avale la restricción de la movilidad de los residentes y las visitas de familiares en el CAD de Santander, como garantía para aislar al centro y frenar el brote existente en ese centro desde hace más de 10 días.
- También pedimos que se aplicasen las medidas de restricción de movilidad a los trabajadores, garantizando que solo se acudiese al puesto de trabajo para tareas imprescindible.
La respuesta del ICASS, sigue siendo argumentar desde una perspectiva meramente ideológica, omitiendo tanto los protocolos técnicos, como la regulación legal vigente y delegando responsabilidades en otros: Consejero de Sanidad, Comisiones Técnicas, Director de centro, Servicio Central de Riesgos Laborales. Nos han dicho que nos responderán… pero esperamos más de lo mismo…
Estamos inmersos en una segunda ola…y la protección a la Salud, sigue sin ser una prioridad para la Dirección del ICASS. Volvemos a encontrarnos en el punto de partida… se desoyen protocolos, instrucciones e incluso sentencias judiciales pronunciándose sobre la vulneración de derecho a la salud de los trabajadores… La única diferencia que encontramos es que se ha organizado una estructura que pretende jugar al despiste sobre quién debe asumir responsabilidades…
¡¡¡El lavado de manos es evidente, pero las cifras son las que son y sus propios argumentos los delatan!!!!
No sabemos nada de recibís de EPIS, no se solicita a Sanidad que declare el brote (hecho imprescindible para plantear la restricción de salidas y la suspensión de visitas)…a la vez cierran los Centros Sociales de Mayores argumentando que su apertura supone un riesgo elevado… se restringen las visitas en el Punto de Encuentro Familiar de Santander argumentando las restricciones de movilidad entre municipios… se restringen las visitas a los menores con medida de protección en base a las restricciones de movilidad… no podemos acceder a servicios esenciales como un Centro de Salud o acompañar a familiares en Hospitales en aras de la prevención… y el ICASS sigue, cuestionando a los ciudadanos que responsablemente deciden seguir las indicaciones y cuidar a sus mayores manteniendo la distancia… argumentando que las visitas son cuidados y los beneficios de 60 minutos son muchos más que el cuidado de la salud y/o la vida…
El ICASS sigue sin asumir que es el responsable de vigilar y proteger la salud de sus trabajadores. Que con un nivel de alerta sanitaria 4, lo prioritario es el compromiso con la Salud Publica…que no es momento de debates sobre la esencia del teletrabajo. Es momento de contribuir a reducir la movilidad y garantizar la salud de los Empleados Públicos, evitando desplazamientos, evitando aglomeraciones… reduciendo la actividad presencial a la estrictamente necesaria para parar los servicios… hubo meses para prepararse…. meses para organizar y prever… seguimos sin contar con: acceso remoto a los escritorios…los trabajadores siguen sin certificado digital…. sin firma electrónica…
Para más inri, tenemos que oír lecciones magistrales… una mascarilla quirúrgica no es un EPI… tenemos que estar en constante revisión de los datos facilitados desde los centros, para asegurarnos que coinciden con la realidad… hay centros de trabajo en los que la Dirección sigue adoptando, decisiones más que discutibles…o que se desoyen requerimientos de trabajadores en función de criterios personales y/revanchistas….
Estamos hartos de negligentes y mediocres… de presiones y prepotencias… de escuchar como tenéis que tragar conductas que están tipificadas tanto por el derecho administrativo como por el Código Penal…
Si volvemos a tener noticias de un centro en el que sus responsables están aludiendo a una denuncia judicial como arma arrojadiza contra cierto colectivo de trabajadores, decir que no dudaremos en poner a estos responsables frente a los jueces de nuevo si no cejan en el acoso u derribo a los trabajadores. A vosotr@s compañer@s sentimos mucho que además de trabajar en esas condiciones tengáis que aguantar que irresponsables e incompetentes de tal calibre estén trabajando en los centros. Cualquier noticia por favor hacernos llegar, estamos en ello y se trata de hechos muy claros perseguirlos por la justicia.
En abril nos vimos obligados a pedir auxilio judicial para protegeros… ahora ya tenemos parte del camino andado y la mochila preparada…no nos costará volver a llamar a la puerta de los Juzgados.
Eso si… si una y otra vez es el Sistema Judicial es quien tiene que asumir las funciones de dirección y gestión… tal vez sea el momento de revisar estructuras y aligerar cargos directivos que no tienen ninguna responsabilidad que asumir.
LOS CENTROS DE TRABAJO NO SON FEUDOS… EL ICASS NO ES UN REINO MEDIEVAL…
